Cómo cuidar a un bebé con cólicos

Ser padre o madre por primera vez es un reto. El reto añadido de un bebé inquieto o con cólicos hace que la paternidad sea aún más difícil, especialmente durante la pandemia del COVID-19, cuando nuestras redes de apoyo posparto pueden ser diferentes que en otras ocasiones.

¿Qué son los cólicos?

Todos los recién nacidos lloran y están inquietos, pero se dice que un bebé por lo demás sano que llora más de 3 horas al día, más de 3 días a la semana y durante más de 3 semanas tiene cólicos. A menudo, nada de lo que hagas detendrá el llanto. Los cólicos suelen empezar alrededor de las 2-5 semanas de vida y suelen desaparecer hacia los 3-4 meses de vida.

¿Cómo puedo saber si mi bebé tiene cólicos?

Los bebés con cólicos están sanos, crecen bien y no tendrán consecuencias negativas para la salud a largo plazo a causa de los cólicos. No existe ninguna prueba de diagnóstico para los cólicos. Si crees que tu bebé tiene cólicos, habla con tu pediatra sobre el patrón de llanto para determinar si es un cólico y las estrategias para ayudarlo.

Los bebés también lloran por razones distintas a los cólicos. Llame a nuestra oficina o busque atención de inmediato si su bebé tiene llanto asociado a fiebre, está menos alerta de lo normal, no se alimenta bien, vomita o pierde/no gana peso.

Cómo tratar los cólicos

Al igual que no existe una prueba de diagnóstico para los cólicos, los médicos tampoco saben con exactitud cuál es su causa. Desgraciadamente, no existe un tratamiento específico que pueda hacer que desaparezca rápidamente. Sin embargo, hay diferentes estrategias que pueden ayudar. Recuerda que cada bebé tiene su propia manera de calmarse y que lo que funciona para un bebé puede no funcionar para otro. Mi hijo se ponía aún más inquieto con un baño caliente, pero se calmaba cuando lo sacaban a pasear en la mochila delantera. Después de asegurarte de que tu bebé no tiene hambre y tiene el pañal limpio, aquí tienes otras estrategias que pueden ayudarte:

Movimiento

Prueba a realizar movimientos en los que el bebé tenga un contacto estrecho contigo, como mecerlo, pasearlo o hacerlo rebotar en una pelota de ejercicios. Mantén al bebé cerca de ti y acaricia o frota su espalda. También puedes probar a dar un paseo en coche o en silla de paseo.

Sonido

Canta o habla al bebé, pon música tranquila o utiliza una máquina de ruido blanco.

Considerar un desencadenante dietético

A algunas madres lactantes les ayuda suprimir los lácteos. Si decides hacerlo, elimina un alimento cada vez. Asegúrate de seguir comiendo, cuidándote y consumiendo suficientes calorías.

Pruebe una botella diferente

Si se alimenta con biberón, considere la posibilidad de probar un biberón diferente que pueda reducir la cantidad de aire tragado, o consulte a su pediatra para ver si una fórmula diferente podría ser útil. A menudo los bebés con cólicos son iguales independientemente de la fórmula.

Disminuir la estimulación

A veces, una habitación oscura sin ruido ni movimiento puede ser útil.

Otras ideas

Intenta hacer pausas en las tomas para que eructe más a menudo. También puede considerar el uso de un chupete.

¿Y si nada ayuda?

Sepa que los cólicos no son culpa suya. Tu bebé superará esta fase. Cuídate y pide ayuda cuando la necesites. No pasa nada por acostar a tu bebé en la cuna o el moisés y tomarte un descanso antes de volver a intentar calmarlo.

Un gran recurso para aprender más sobre cómo calmar a un bebé y hacer frente al llanto se puede encontrar en: http://purplecrying.info/